Vamos a dejar de lado la polémica que siempre causan las nuevas versiones de clásicos que en su momento lograron gran éxito y que para varios de nosotros forman parte de esos gratos recuerdos que tenemos de nuestra infancia, por lo que representaron, lo que hace que hasta hoy en nuestros días las sigamos disfrutando como una visita a ese ayer que extrañamos y que volvemos a retomar cuando las vemos en nuestro presente.
“Matilda” de 1996 es una película infantil que forma parte de nuestro corazón, en donde Mara Wilson, Embeth Davidtz, Danny DeVito, Rhea Perlman y Pam Ferris lograron conquistarnos con sus icónicos personajes a un grado tan especial que difícilmente alguna nueva versión de esta historia escrita por Roald Dahl podrá superarla, por lo que la llegada de esta pequeña a la casa Netflix la hizo estar en la mira por la lluvia de comentarios que surgieron en redes sociales, desde los que aplaudían el regreso para las nuevas generaciones, como de aquellos detractores que la apuntaban como un rotundo fracaso.
Pero vaya sorpresa la que nos llevamos aún con lo arriesgado que representaba traerla de vuelta ahora como musical, y es que como bien sabemos no todo el público es fanático de las películas en donde canción tras canción nos van narrando la historia de esta niña especial, mágica y deseosa de aprender que nació con la familia equivocada y que el destino la hace vivir varias experiencias dentro de un colegio en el que todo no mancha bien, principalmente por su tirana directora, la ahora popular Tronchatoro, la cual guarda un secreto que va mucho de la mano con la maestra Miel, ese ángel guardián que llegará para salvar a Matilda y de paso recibir ayuda de ella para recuperar la herencia de su padre. Es así como Matilda Wormwood, la joven que descubre que tiene habilidades mágicas y qué es una genio que se deleita leyendo libros y aprendiendo, comienza una aventura muy especial para dejar de ser maltratada por sus padres, a quienes solo les importa el dinero y castigar a su hija.
No pensé decirlo, pero esta versión 2022 ha resultado encantadora por respetar la historia original con mayor humanidad, por el carisma de su nueva protagonista Alisha Weir, la dulzura de Lashana Lynch (en una grata muestra de inclusión), y el enorme placer que es tener a la extraordinaria Emma Thompson con un papel tan icónico que lo lleva a mayor altura; por la complicidad entre los pequeños actores que forman el reparto donde la música estará presente con increíbles coreografías, colorido, aventuras, efectos visuales de calidad, la dosis de humor suficiente y principalmente ese amor nostálgico se respira en el aire.