Es muy difícil que una caricatura exitosa llegue a estar a la altura de la nostalgia que invade a todos una vez que sabemos llegará a la pantalla grande como un live action, y claro ejemplo está la enorme cantidad de fracasos que existen en el camino, uno muy claro es “Dragon Ball Evolution” en 2009; pero si hay algo que podemos destacar en “Los caballeros del Zodiaco: Saint Seiya – El Inicio” son las enormes ganas que mostraron por querer hacer un producto atractivo para los fans y con ello contagiarnos la nostalgia de aquel programa que siendo niños veíamos todas las mañanas de sábado por televisión abierta.
Basada en el superéxito del anime, Seiya (Mackenyu), un testarudo adolescente callejero, se pasa el tiempo luchando por dinero mientras busca a su hermana secuestrada. Cuando en una de sus peleas se le revelan poderes místicos que desconocía, Seiya se ve inmerso en un mundo de santos en guerra, antiguos entrenamientos mágicos y una diosa reencarnada que necesita su protección. Para sobrevivir, tendrá que aceptar su destino y sacrificarlo todo para ocupar el lugar que le corresponde entre los Caballeros del Zodiaco.
Pese a que los efectos especiales no son de la calidad a la que estamos acostumbrados en la actualidad, a que la caracterización de los personajes no del todo nos termina de convencer porque más parece un proyecto de jóvenes universitarios y a que en sí la historia no tiene la fuerza que hubiéramos necesitado para una primera entrega de la que se tiene esperanzas realicen más, la película es entretenida, nos brinda momentos de emoción y aún con las enormes fallas visuales que pueda tener y que los personajes no del todo nos permiten conectar con ellos al ser superficiales y sentirse ajenos, esta coproducción Japón, Estados Unidos y Hungría, trata de hacer homenaje a los queridos personajes que por varios años han formado parte de los corazones de sus miles de fans.
Aún cuando los diálogos son un poco mediocres, bien vale la pena darle una oportunidad a este proyecto solamente si eres un auténtico fan, de lo contrario saldrás decepcionado de la sala de cine al sentir que esto no le hizo la justicia necesaria para lo que actualmente se vive en el universo de los superhéroes, y es que pese a su notorio bajo presupuesto y falta de coherencia en la historia, intenta ser el inicio de una saga que solamente dependerá de la aceptación que tenga del público y el dinero que logre recaudar en taquilla, amén del cambio en el diseño de las armaduras que no del todo ha sido bien recibido por las audiencias.