Ni yo mismo sé lo que acabo de ver, pero lo que me queda claro es que “Fuga de Reinas” es una verdadera porquería de película que no tiene absolutamente nada rescatable; si bien la calidad de la producción mexicana es buena, este título que llega a Netflix bajo la creación de Martha Higareda es totalmente absurdo, ridículo, mal actuado, con un pésimo guión y para colmo de males, trata de parecerse a los títulos gringos mediocres que por aquel lugar tienen éxito.
Este fallido intento de comedia es escrito y protagonizada por Higareda, y cuenta la historia de Paty, Marilú, Famela y Estrella, cuatro mejores amigas que se embarcan una aventura inolvidable para dejar atrás sus vidas rutinarias, muchas de ellas con la finalidad de alejarse de sus maridos o novios. Sin embargo, lo que pareciera una divertida aventura se vuelve mucho más salvaje de lo que habían imaginado. Tras varios cambios en el plan y cambios de ruta, la presencia de la misteriosa Lola y otras nuevas amistades que se encuentren en el camino, harán que jueguen con fuego y se vean envueltas en una red criminal de la que intentarán salir.
Como tal no podemos definir en un género a esta película, porque intenta ser comedia y no lo logra, quiere ser un thriller y tampoco lo consigue, solamente se siente como una serie de piezas sueltas que tratan de armar una historia que no tiene pies ni cabeza, en donde las protagonistas carecen de personalidad y química entre ellas, y los personajes secundarios, entre ellos los villanos, son tan grises que se sienten innecesarios, además los efectos visuales que podemos encontrar (en especial con la estampida de gallinas y el golpazo que una de ellas se da en un árbol) resultan ser totalmente chafas.