Ante las constantes quejas que los automovilistas le han hecho llegar por los retenes de Tránsito Municipal de Veracruz, el Movimiento Renovador Democrático (MRD), anunció que asesorará a los propietarios de vehículos en estos casos, al considerar que con los retenes o puestos de revisión, se está cayendo en la ilegalidad.
Al respecto, el presidente del MRD, Marco Antonio Moncayo Parra y el abogado Edgar Cinta Pagola, señalaron que con los retenes o puntos de revisión de Tránsito Municipal se violentan los derechos fundamentales cuando somete al ciudadano al acto autoritario de un retén.
En declaraciones a medios explicaron que en lo general, con arreglo a la ley, los retenes si no están soportados por escrito por autoridad competente y facultada, en que motive y funde sus actos, son inconstitucionales, “más en los casos de tránsito y policía que solo generan corrupción y abuso, con absoluta ilegalidad, arbitrariedad y atropello de las autoridades administrativas”, denunciaron.
Los retenes trastocan los derechos fundamentales de las personas garantizados en las Constitución
El abogado Cinta Pagola precisó que en los retenes de Tránsito Municipal no se cumple con lo establecido en los artículos 16 quinto párrafo, y 21 cuarto párrafo constitucionales, en relación con los diversos 146 y 152 del Código Nacional de Procedimientos Penales, como casos de excepción por flagrancia o urgencia.
Subrayó que los retenes trastocan los derechos fundamentales de las personas garantizados en las Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado mexicano forma parte.
Ante ello, el presidente del MRD, Marco Antonio Moncayo Parra, entregó un oficio dirigido a la Presidenta Municipal de Veracruz, Patricia Lobeira Rodríguez, en el que solicita su intervención y consideración, para que se instruya quitar los retenes de Tránsito Municipal, que se ubican en distintas vías de la ciudad, como en Bulevar Fidel Velázquez, avenida Rafael Cuervo, en las inmediaciones del Puente Jiménez, entre otros. Denunció que en los retenes los agentes aprovechan cualquier situación para obtener dinero, se han convertido en “auténticos puestos recaudatorios”.
“No se puede detener a un automovilista que va circulando si no ha excedido la velocidad autorizada, porque se viola su derecho al libre tránsito y la movilidad”, asentó.
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