La calidad y calidez en el trato a la gente en cualesquier de los servicios públicos y privados debe ser el compromiso fundamental; sin embargo, de unos meses a la fecha lejos de mejorar en la prestación de estos conceptos, en casos concretos de cafés y restaurantes de Veracruz-Boca del Río sucede todo lo contrario.
Este pronunciamiento del señor Carlos Carrillo Chávez, asiduo concurrente a un negocio tradicional de la zona del Malecón del Paseo, coincide con otros porteños que a diario disfrutan la aromática bebida incluyendo turistas al encontrar el retiro de detalles que por siempre acompañaron las mesas: servilleteros, azucareras, cucharas apropiadas y bloqueo de salidas de emergencia en los restaurantes.
Visión equivocada
Fue enérgico el cafetómano al decir “Un comportamiento así, tomado de manera unilateral revela actitud equivocada de responsables de la administración y operación de los negocios.
Se interpreta como forma de agredir a los veracruzanos que día con día consumen sus productos, por cierto fijando precios de acuerdo con el ánimo prevaleciente del operador de la empresa, siempre por arriba, con mucho del justo medio”.
Hablamos de visión equivocada de quienes se atreven a señalar: “La parte fuerte de sus ofertas radican en la concurrencia de turistas, desdeñando la importancia de la población local que los respalda la mayor parte del año. A ese paso, sólo falta que pronto en lugar de cubiertos de metal los sustituyan por material de plástico. Ya lo hacen con cucharas soperas en lugar de las adecuadas para mover el café”.
Alta rentabilidad de la comida
Una verdad que la mayoría de la población comparte se refiere a la alta rentabilidad obtenida en la industria gastronómica, dependiendo del arraigo logrado por cada negociación; pero en promedio, según el señor Carlos Carrillo Chávez, duplican el costo de los insumos y preparación de alimentos, destacando algunos que a la leche y café cuatriplican o más esa cifra.
Por lo tanto ofende que ante tales ganancias, restrinjan comodidad a quienes les dan vida.
Sigue omisa protección civil
Por último, el vocero de los inconformes lamentó la conducta omisa del personal de Protección Municipal de Veracruz ante el llamado de la ciudadanía para verificar el correcto número abierto de salidas de emergencia sobre todo en negocios donde la clientela en caso de un siniestro, en las condiciones actuales esté obligada a trasladarse en condiciones de tumulto hasta un solo punto de entrada y salida.
Además, exigir la regulación del ruido convertido en tóxico ya sea de marimba o jaraneros que impiden una plática cómoda de buena parte de gente adulta.
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