Antonio Pérez Garibay, padre de Checo Pérez, desveló el verdadero motivo que lo llevó a ser hospitalizado de emergencia y por el que estuvo varios días en terapia intensiva.
A casi cinco días de ser ingresado en hospital, el exdiputado de Morena dio a conocer que se desmayó en el baño de su casa tras ver el Gran Premio de Azerbaiyán el domingo pasado.
“Cuando Checo termina la carrera yo voy al baño, y en el baño me desmayo. Entonces cuando mi gente me encuentra piensan que me dio un infarto”, comentó en entrevista con Tv Azteca Deportes.
Pese a que se creía en primera instancia que había sufrido un infarto, el padre de Checo Pérez detalló que realmente padeció una grave hemorragia que lo tuvo al borde de la muerte.
“Llaman a la Cruz Roja, la Cruz Roja entra aquí a mi casa, me sacan de mi cuarto, me llevan a un hospital, pero como un infarto. Lo que yo traía era un derrame, una úlcera derramando sangre internamente”, añadió.
Pérez Garibay, quien ha acompañado en más de una ocasión a Checo en la Fórmula 1, aseguró que perdió dos litros y medio de sangre y reconoció que de no haber sido por la pronta intervención de los paramédicos de la Cruz Roja habría muerto.
Padre de Checo Pérez desvela que sufrió una fuerte hemorragia el domingo pasado
“De aquí me sacaron prácticamente muerto. Estoy muy agradecido con la Cruz Roja, la verdad, me salvaron. Sin ellos, hubiera perdido la vida aquí en la Ciudad de México”, informó.
Sobre cómo comunicó esta noticia a su hijo, quien recién había corrido el Gran Premio de Azerbaiyán, Pérez Garibay detalló que trató de ocultar la gravedad de su padecimiento, aunque no pudo hacerlo por mucho tiempo.
“Checo habló conmigo y me dijo: ‘Papá, no te creo nada. Pásame al doctor’. Entonces, Checo y Toño hablaron con el doctor, quien les explicó que estaba estable en el tema del corazón, pero que tenía otros problemas, como la pérdida de sangre. Tuve que quedarme en terapia intensiva tres días”, declaró el padre de Checo Pérez.
Finalmente, el padre de Checo Pérez pidió a su hijo no perderse ni una carrera en caso de que llegue a morir en un fin de semana.
“La función tiene que continuar. Si yo tengo que morir este viernes, o el día que tenga que morir, y hay Gran Premio, que no vengan a mi sepelio. Que corran el Gran Premio. Eso desea su padre. No permitiría yo ni en vida que vinieran a mi sepelio y perder una carrera”, finalizó.
Hasta este momento, Checo Pérez no ha emitido un posicionamiento por el estado de salud de su padre. El piloto mexicano cumplió con sus compromisos el jueves en el día de medios del Gran Premio de Singapur y estuvo presente en las dos primeras prácticas de este viernes.
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