John Wick HA MUERTO, y con ello el final de esta electrizante saga tiene lugar en una emocionante cuarta parte que llega con una bocanada repleta de violencia y muertes en el camino de venganza de nuestro protagonista, quien se enfrenta a un nuevo villano, el marqués Vincent de Gramont, todo en una explosión de acción, balas y situaciones inesperadas en este festín que tomará por sorpresa a los fans y de la que difícilmente podremos tener otra entrega.
Como sabemos en una película de acción no podemos pedirle mucho a la historia, pero sin duda cautivó a las audiencias por el origen de todo: Un asesino retirado que padece la muerte de su esposa y que en su duelo se hace de un perrito que le es heredado por el amor de su vida al cual matan unos mafiosos después de que tuviera un pequeño percance con ellos, y quienes de paso le roban su auto, lo que desata la furia de nuestro protagonista, el siempre excelente Keanu Reeves, quien a como dé lugar buscará venganza y en el camino se desatará una serie de complicaciones con personas que han formado parte de su vida.
La exitosa cinta original de 2014, llevo a una aceptable segunda parte en 2017, sumándose a ello una explosiva tercera en 2019, lo que nos dejó con un emocionante final y que marca el inicio de esta cuarta dirigida por Chad Stahelski, y que es una de las cartas más fuertes del 2023 con más adrenalina a la que se suman personajes que conocimos durante la saga y los cuales comienzan a tener sus finales, encontrando ahora a Bill Skarsgård como un villano intenso y desquiciado, y un hombre, con perro incluido, que está tras la cabeza de John.
El elemento indispensable que funciona mucho es que continuamos disfrutando las secuencias largas de acción con coreografías muy bien logradas, además del acompañamiento del sonido y ahora una serie de tomas aéreas para algunas de estas escenas en donde los disparos están a la orden del día; Wick es perseguido nuevamente por una gran cantidad de personas que quieren cobrar los ahora 40 millones de dólares que piden por él, y donde se enfrentará a amigos del pasado que también desean sobrevivir.
El detalle, tenemos escena post créditos con la presencia de Akira, la hija de Shimazu, el cual muere en el Continental de Osaka en manos de Caine, otro de los “villanos” que encontraremos aquí, un hombre ciego que quiere cuidar a su hija y que tras sobrevivir al duelo que tuvo con Wick, la joven desea venganza y aparece enfrente de él con un cuchillo lista para matarlo.
Con el personaje de Reeves muerto, es muy difícil que se logre una nueva entrega, a menos que exista una precuela o spin-off, o que a la mera hora, como es la magia del cine, éste no muriera.