Primero fue la frecuencia de los frentes fríos con la consecuente inestabilidad de las mareas; pero luego sin causa aparente, la ausencia de especies continuó, ayer cumplieron 80 días de manera ininterrumpida con esta situación que tiene a integrantes de este gremio alarmados, informó Bernardo Hernández Guzmán, presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras de Veracruz.

Al grado de la desesperación aparecen las familias dependientes de esta actividad costera con el resultado de jornada de 10 o más horas cuya producción de 15 kilogramos promedio por lancha es insuficiente ni siquiera para cubrir costo de gasolina y otros insumos, dejando de lado la percepción económica de los 3 tripulantes por unidad.

Pasan los días y el panorama sigue incierto.

Aunque en las últimas horas de ayer registraron alguna mejoría de manera aislada, conocieron pocos casos con capturas de 50 kilogramos, reiteran la solicitud de intervención oficial a través del Instituto Nacional de Pesca, Universidad Veracruzana o bien el Instituto Tecnológico de Boca del Río a fin de emprender estudios que permitan definir el origen del problema de escasez de cardúmenes que suelen arribar a la costa veracruzana.

Por supuesto, aseguró Hernández Guzmán, urge despejar la incógnita, sacudirse la duda y de ser necesario, los pescadores respaldarían medidas que contribuyan a recuperar el equilibrio ecológico, porque significa garantía de continuidad de un oficio del cual obtienen el sustento diario.

Alarma entre pescadores por caída en volumen de capturas

El escenario de los pescadores se complica en este momento con el retraso prolongado en oportunidad de entrega del apoyo de Bienpesca que en 2022 hicieron efectivo los 7 mil 500 pesos por socio de las cooperativas en el mes de enero.

Esperaban que en el presente año ocurriera en abril y estamos a punto de cerrar mayo y aún se desconoce fecha precisa.

Se supone que este estímulo compensatorio aparece en la etapa de vedas y en este momento establecieron la de tiburón y camarón tanto de altura como del sistema lagunario.

Por si lo anterior no fuera suficiente carga negativa, el pescador veracruzano padece faltantes en materiales requeridos en reposición de artes de pesca, principalmente redes.

De varias semanas a la fecha, las tiendas especializadas reportan carencia de este material, agotan inventarios y por baja movilidad de la mercancía, en la misma proporción el fabricante reduce ritmo de producción nueva. 

Preocupa y mucho la ruptura del esquema fluido de la oferta y demanda, propio de un país con futuro progresista.

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