Me preocupa saber a quién se le ocurrió la grandiosa idea de realizar esta película que desgraciadamente es uno de los peores trabajos que pueden existir; pese a estar dirigida por la también actriz Elizabeth Banks, es una cinta que causa pena en todo momento, supuestamente basada en hechos reales, pero lamentablemente es incongruente en su guión, los personajes son pésimos y no tienen ni gota de química, pese a ser el último proyecto de Ray Liotta en vida, y tener entre su cast a Keri Russell, es una aventura que se va en picada rápidamente y causa pena ajena por ser incómoda, absurda, y sus efectos visuales tan falsos como la pregunta que nos hacemos al terminar y decirnos ¿por qué me atreví a ver esto?
En esta disparatada película, el avión de un narco cae en el bosque y un gran oso negro ingiere enormes cantidades de cocaína. Enloquecido por la droga, el animal siembra el terror entre turistas, policías y criminales, por lo que se da la libertad de comenzar a mandar a todo aquel que se cruce en su camino sin importarle la edad que pueda tener, pero se pasó, se va encontrando con más droga que va consumiendo de manera insospechada.
Creo que desde su título “Oso intoxicado” ya sabemos a lo que vamos, pero existen películas que por más extrañas o tontas que resulten, al menos logran tener un algo que las haga destacar y a veces hasta las convierten en clásicos de culto, pero aquí aun cuando su inicio nos hace pensar que la cinta contará con una muy buena producción y que se encamina hacia el terror, comienzan a llegar las escenas absurdas, las muertes ridículas con personajes tan ajenos que para nada conectamos con ellos, y ni nos importa lo que les pase, es donde descubrimos que nada tiene sentido, que estamos perdiendo nuestro tiempo y que aún con ello el oso, que en realidad es osa, es tan falso como sus efectos mal logrados.