Colombia, profesional y talento natural
Precedido por una notable formación académica en la Universidad de Antioquia, donde obtuvo la licenciatura en Artes Plásticas y un gran número de cursos y experiencias en historia del arte, dibujo, pintura, y también en el Centro Artístico y Cultural Sócrates, Andrés Felipe Berrio Pinillos conversa con nosotros para contarnos de su profesión, en la que va implícito su singular talento natural artístico, que ha plasmado en importantes obras en su país y merece ser conocido a nivel mundial.
En la charla para El Dictamen, de Veracruz, México, que presencia la Asociación Cultural Antonio Montes, de Málaga, España, iniciadora del proyecto para dar a conocer el arte en Iberoamérica, y que tiene el apoyo de la Asociación Multicultural Canadá Nos Une, de Toronto, y de asociaciones culturales de raíces hispanas, como en Australia, Italia, Dinamarca, nos comenta su ideología, su análisis del ser humano actual y lanza sus cuestionamientos, que para muchos de nosotros no tienen respuesta válida.
Se pregunta la razón que tiene el ser humano para autodestruirse, y destruir su entorno, que son la naturaleza, la familia, y su propia vida arraigada a situaciones efímeras, con bases sombrías y confusas en las que prevalecen la vanidad, la codicia, el desamor y la ausencia de espíritu. Aunque ha realizado su arte en murales y en obras específicas con otros temas como las que hizo en el Jardín Infantil del Arte y en el zoológico, por ejemplo, cuando le preguntamos cómo imprime en las obras que desea y realiza su crítica al ser humano, nos responde: “Lo hago en paisajes melancólicos con desnudos femeninos principalmente, evocando la divinidad del ser humano, pero a la vez su fragilidad, acompañándolo con símbolos como cadenas, rejas, vendas, telas, crucifijos, llaves antiguas, y en especial el reloj de arena roto, que representa al humano inhumano, y también la ceguera espiritual que nos separa de nosotros mismos y de nuestro entorno”.