Por: Manuel Lucio/Retratista
Talento, necesidad y vocación, ingredientes necesarios en la vida del ser humano para triunfar en lo que se proponen dentro del mundo material, y Dulce María Calderas es un ejemplo de ello, una persona tenaz y disciplinada que imparte sus cátedras de ejercicios para mantenerse y mantener en forma a sus entrenos, combina esto con su labor de conductora en un programa, pero no pierde el enfoque de madre responsable y dedicada a la buena educación sus hijos.
Fue una tarde divertida de fotos que expresan algo de su personalidad y esencia como ser humano. La sociedad veracruzana nos dice: “Es alegre, con muchas tradiciones hermosas, la marimba y el danzón son algo único de ellos, son generosos y me encanta como son dicharacheros”. El trabajo en general: “Es lo más bonito porque hago lo que me gusta y me pagan, creo que lo que hagamos lo debemos hacer con amor, pasión y agradeciendo siempre tenerlo. El mensaje que les quiero dar es que nunca dejen de luchar por lo que quieren, que nadie les diga que no pueden, que lo intenten una y otra vez y nunca se rindan, háganlo siempre con pasión y nunca es tarde para cumplir tus sueños. Yo siempre digo agradezcan todo hasta lo malo, porque siempre aprendes de todo”.