¿Qué tanto está dispuesta a hacer una madre por cuidar a sus hijos? Cuando creíamos que todo podría mejorar, aparecen nuevos problemas y estos se suman a toda la cadena de situaciones negativas que Georgia Miller ha vivido en el pasado, donde algunos demonios regresan, las cuestiones emocionales se fracturan y el peligro se encuentra cerca, lo que le da temor a ser feliz. Pero en este camino Ginny ahora está madurando y también es parte de problemas emocionales muy complicados y violentos que son reflejo de los errores cometidos, y en ese camino también figura Austin, el hijo pequeño que comienza a entender lo que ocurre a su alrededor en ese espacio tan acogedor que ofrece el pintoresco pueblo de Wellsbury.
“Ginny & Georgia” en esta segunda temporada es aún más emocionante que la primera, donde madre e hija vivirán nuevas situaciones que pondrán su mundo de cabeza, por lo que deberán luchar para mantenerse unidas, estar al pendiente del hijo y hermano pequeño y con ello permitirse la oportunidad de sentirse amadas, aún cuando parezca que todo está en su contra. Tenemos 10 episodios que nos hacen entender que la vida no es fácil, mostrando situaciones complicadas, crudas, intensas y peligrosas, tanto para jóvenes como adultos, donde se permite un espacio para la ilusión, la felicidad y la esperanza de que las cosas pueden mejorar si existe amor y unión familiar.
LO BUENO: Tenemos a todo el reparto de regreso y créanme cuando les digo que cada uno de los personajes, forma parte fundamental para continuar narrando esta historia en la que cada episodio muestra una nueva sorpresa. Todo está de cabeza y a ello se suma la aparición de un personaje del ayer que es de cuidado (el papá de Austin), del que conoceremos su historia gracias a los flashbacks que continúan haciéndose presentes mostrando la etapa joven de Georgia.
LO MALO: Esta es una de esas series dramáticas que en ningún momento nos deja descansar por todo lo que se vive, pero es gracias a la buena interpretación de todos los actores, lo que permite sentimos atrapados por la historia retorcida de una madre e hija cautivadoras y llenas de química, y me atrevo a decir que estamos ante uno de los mejores proyectos actuales que Netflix ofrece dentro de su catálogo, deseando con ansias una tercera temporada.