A estas alturas, ante los impactos atípicos de la naturaleza a escala global, nadie duda de la amenaza que significa un clima con manifestaciones erráticas, condiciones que exigen respuestas tecnológicas existentes que nos permitan sostener producción de alimentos básicos como el maíz.
Por esa razón, la comunidad científica y tecnológica mexicana busca alianza con productores progresistas convencidos de que urge cambiar modelos tradicionales para sobrevivir ante el escenario de ausencia de lluvias por periodos prolongados que llevan a siniestros de grandes proporciones al grado de registrar pérdidas totales, declaró el investigador Francisco Javier Ugalde Acosta.
Muestran ejemplos concretos
La mejor forma de convencer a la gente de campo de las ventajas de la actualización de esquemas de cultivo es con resultados concretos y exitosos. Eso sucedió en fecha reciente en Chacaltianguis, Cuenca Baja de la Cuenca del Papaloapan, sitio en el cual montaron módulo demostrativo de innovación ocupando semilla de maíz H-520, tolerante a sequía extrema.
Cabe destacar la participación directa del doctor Mauro Sierra Macías mejorador del maíz, en la siembra hecha el 24 de diciembre del 2023 en la localidad de Dos Caminos de la municipalidad referida.
El 26 de marzo del presente año realizaron visita para conocer respuesta de la planta a la ausencia de humedad, falta de lluvia invernal a causa del fenómeno climático de “El Niño”. Obtuvieron resultados satisfactorios, la primera etapa en forraje para alimento de ganado.
Recordemos pidió Ugalde Acosta, el problema se agudizó en marzo y abril; pero los maizales permanecieron firmes, en otros frentes con semilla diferente se perdieron al 100 % sin importar el estar en zonas bajas. Lo que demuestra la bondad del potencial genético del H-520 heredado de la raza tuxpeño nativo del Golfo de México.
Evaluación general
Apenas el 17 de abril levantaron evaluación general con los siguientes indicadores: resistencia ya se dijo a sequía extrema, también a violencia del viento, buena cobertura de mazorcas, tolerancia a enfermedades y mejoría en tipo de grano.
Levantaron rendimiento de 4.2 toneladas por hectárea bajo condiciones de alta restricción de humedad con sólo disponibilidad de 120 milímetros en todo el ciclo o sea, hablamos de una cuarta parte de la lluvia requerida para producir maíz en índices rentables.
Los productores de Dos Caminos, municipio de Chacaltianguis ingresaron $ 36 000.00 por la cosecha de una hectárea y el costo del cultivo ascendió a $ 15.00 por la misma superficie, sin considerar el valor del forraje previamente aprovechado.
Queda demostrada la superación de barreras establecidas por la naturaleza cuando echamos mano de la figura virtuosa de: suma de tecnología, talento de agricultores y profesionales de la agronomía.
Falta la aportación del gobierno federal y del Estado para potencializar los beneficios y alcancemos satisfacción del compromiso de autosuficiencia alimentaria.
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